Todo tiene su tiempo en esta vida, solo aprende a esperar.
3 Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.
2 Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado;
3 tiempo de matar, y tiempo de curar; tiempo de destruir, y tiempo de edificar;
4 tiempo de llorar, y tiempo de reír; tiempo de endechar, y tiempo de bailar;
5 tiempo de esparcir piedras, y tiempo de juntar piedras; tiempo de abrazar, y tiempo de abstenerse de abrazar;
6 tiempo de buscar, y tiempo de perder; tiempo de guardar, y tiempo de desechar;
7 tiempo de romper, y tiempo de coser; tiempo de callar, y tiempo de hablar;
8 tiempo de amar, y tiempo de aborrecer; tiempo de guerra, y tiempo de paz.
El nos guía en todo tiempo y circunstancia
Para aquellos que piensan equivocadamente, que en la biblia no pueden encontrar consejos prácticos para la vida diaria estos versículos dejan muy claro que eso no es así.
La biblia está llena de la dirección de Dios para todos nuestros momentos y para todas las etapas de nuestra vida.
Cuando somos niños, queremos crecer, cuando somos adolescentes queremos comernos el mundo y saltar a la mayoría de edad porque creemos que entonces haremos lo que queremos.
Cuando somos jóvenes ya estamos pensando en casarnos, encontrar nuestra media naranja y soñamos muchas cosas, y cuando estamos en nuestra etapa adulta, cuantos de nosotros no hemos deseado volver atrás para hacer distinta alguna que otra cosa.
Todo tiene su tiempo, busca su dirección
Lo primero que tenemos que entender para no errar el camino es encontrar el propósito de Dios para nuestras vidas.
Vemos a los jóvenes ansiosos por encontrar el amor, y sin buscar la voluntad de Dios o sin oír el consejo se van tras amores que tantas y tantas veces los lastiman o cambian el plan perfecto que Dios tenia para su vida.
Pero tengo una buena noticia, si has quemado etapas en tu vida, y si te has equivocado, quizá torciste el propósito que tenía Dios para ti o el sueño que El tenia para tu vida, pero Dios es un Dios de amor, de misericordia y nunca se queda sin ideas.
Los momentos difíciles vendrán y eso es una realidad, no estamos exentos de sufrir dolor, o problemas, por eso hay un tiempo de llorar también, pero viene el tiempo de reír.
Cuando estés en tiempo de angustia enciérrate en tu lugar secreto, derrama tus lágrimas ante tu Padre y luego sécate las lágrimas y levanta tu cabeza, porque el sol saldrá, y el tiempo de reír llegara.
Dios no se ha olvidado de ti, a veces tenemos la percepción que todo nos pasa a nosotros, que Dios nos ha abandonado, que todos nos han abandonado, pero, eso no es así, los demás podrán dejarte pero Dios quiere enseñarte que aunque no veas a nadie a tu lado, El si está contigo.
Déja que El guie tus tiempos.
Él te enseñara en cada prueba que te toque vivir, a callar o hablar en el momento adecuado, y esto es muy importante porque a veces hablamos fuera de tiempo y si el fin era conseguir algo bueno, pues por errar el tiempo, perdemos, y ante eso mi querido lector, solo puedo decirle ore y busque dirección antes de hablar siempre.
Conclusión:
Todo lo que deseas para tu vida, puedes estar seguro que Él lo sabe, pero busca su propósito y su voluntad, cuando sembramos hay un tiempo que tenemos que esperar para ver nuestra cosecha, eso aplica a la vida misma.
Hay un tiempo en el que se nace y otro tiempo en que llega nuestra hora de partir, que ese tiempo te llegue con la seguridad de que has vivido la vida en Cristo, y que aun con lágrimas o risas, ha sido una vida plena.
Y jóvenes, no se apuren en sus decisiones sentimentales, la decisión que tomes hoy determinara la calidad de tu futuro, por lo cual, no hagas nada sin que El Señor te lo confirme.
Saber esperar da sus buenos frutos.
